¿Me pueden embargar por deber 10,000 pesos?

El tema del embargo genera cierto halo de preocupación entre los mexicanos. De manera especial, la pregunta de ¿por cuánto dinero te pueden embargar? Es una de las que más se encuentran en el aire. 

Pero antes de conocer, este tema, expliquemos lo primordial. 

¿Qué es un embargo? 

Un embargo es una herramienta  a la cual tiene derecho el banco o entidad financiera que le debes, esto con el fin de retener los bienes o inmuebles para pagar tu deuda pendiente. Pero, hay que tener en cuenta que esta orden solo la puede dictar un juez mercantil, si es que el banco solicita llegar a este punto. 

¿Cómo saber si mi cuenta está embargada? 

Si temes que un abogado toque tu puerta y te quite todo lo que has construido, debes estar al pendiente de tus cuentas. Si tienes deudas atrasadas y el despacho de cobranza te ha dejado de amenazar, esto quiere decir que pronto te puede llegar una notificación de embargo. Antes de proceder, te deben notificar con la fecha y hora que se realizará dicho proceso. 

Pero si los despachos de cobranza solo te repiten hasta el cansancio que te van a embargar, lo más probable es que se trate de solo una amenaza que no tiene fundamentos y papeles para ejecutar una orden contra ti. ¡Si estás en en este caso, es mejor que regules tus deudas antes de que sea demasiado tarde! 

¿Por cuánto dinero te pueden embargar? 

La realidad es que no existe un parámetro para definir por cuánto dinero un banco o tienda departamental te pueda embargar. Lo cierto es que lo pueden hacer por cualquier cantidad. 

Al ser el embargo la media a la que pueden recurrir las instituciones para reclamar el pago de un adeudo pendiente, éstas tienen el derecho de emprender demandas de embargo por 10,000 pesos o menos. Todo dependerá del análisis que la institución involucrada realice. 

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En la práctica, es muy complicado que un banco o tienda departamental decida interponer una demanda para cobrar deudas de 10,000 pesos, o por cantidades que consideren relativamente bajas. Y es que, un embargo implica iniciar un proceso judicial, que deviene en destinar tiempo y recursos económicos, algo que las instituciones prefieren evitar. 

Sin embargo, aunque en la práctica no se da con mucha frecuencia, no quiere decir que no se pueda dar. Legalmente lo podrían hacer, no obstante, eso dependerá de los criterios del banco o institución. 

Algo que debes saber es que cuando alguna persona deja de pagar deudas que se consideren pequeñas, algunos bancos, por ejemplo, optan por vender esa deuda. Es decir, ceden los derechos de cobro a un tercero. 

¿Qué se puede embargar?

Si no son indispensables para sobrevivir, todos esos muebles se pueden embargar, tales como: 

• Dinero o cuentas en el banco. 
• Títulos financieros. 
• Joyas y pinturas.
• Rentas. 
• Inmuebles 
• Salarios.
• Créditos de fácil 
• Alhajas
• Bienes muebles en general.
• Automóviles.
• Bienes raíces.

¿Qué muebles no se pueden embargar?

Todos aquellos que sean de primera necesidad y sean necesarios para vivir, tales como: 

• Colchones, despensa y ropa
• Libros 
• Instrumentos musicales 
• Máquinas o instrumentos que sean para trabajar
• Las pensiones

Amenazas por embargo 

Ten en cuenta que antes de pensar en un embargo, los bancos o tiendas tomarán como medida prioritaria la negociación para saldar la deuda pendiente. En todos los casos, el entablar una demanda para retener bienes será el último paso que busquen para recuperar el dinero prestado. 

En este punto es importante mencionar que, cuando una persona cae en impago, las instituciones que otorgan crédito contratan a despachos externos para dar seguimiento a la cobranza. No obstante, algunas veces, estos caen en malas prácticas, y recurren a mecanismos como la amenaza de embargo para tratar de generar miedo y cobrar la deuda. 

Debes saber que ese tipo de prácticas están prohibidas. Y según el Código de Ética que difunde condusef.gob.mx, estos despachos se deben regir por algunos principios de lo que pueden y no pueden hacer al momento de cobrar. 

En esa lógica, los despachos deben:

1.    Identificarse plenamente (nombre completo, empresa en la que laboran y la que representan).

2.    Explicarte tu situación, saldo y negociar el adeudo.

3.    Si llegaste a un acuerdo, entregarte un convenio firmado antes de que realices cualquier pago.

4.    Recibir tus quejas, sugerencias o comentarios y hacerlos llegar al responsable de la Unidad Especializada de la institución financiera.

Lo que no deben hacer es:

1.    Hablarte con lenguaje obsceno, acosarte o amenazarte.

2.    Simular que son autoridad judicial (actitudes, vocabulario, papelería que lleve al engaño).

3.    Comunicarse con menores, o personas de la tercera edad.

4.    Comunicarse contigo entre las 11:00 de la noche y las 6:00 de la mañana.

5.    Utilizar cartelones u otro medio impreso en tu domicilio

6.    Incrementar tu adeudo de manera irregular o hacerte ofrecimientos sin autorización de la institución financiera.

Si recibes amenazas o insultos, puede interponer una denuncia en la Condusef. 

Recuerda que el embargo es una acción que deviene de una resolución judicial. Por ello, para llegar a tal punto, primero el acreedor deberá poner una demanda. En ese caso, sólo un juez, a través de un actuario, es la única persona que puede notificarte si hay embargo en tu contra. 

Ahora ya lo sabes, si un despacho te amenaza con embargo, es mentira. 

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¿Cómo evitar un embargo de bienes?

Si te encuentras en una situación compleja que te impide cubrir el pago de algún crédito, lo mejor es “tomar el toro por los cuernos” y buscar alternativas. Dejar que el problema avance puede traer consecuencias graves. 

Una de las alternativas óptimas en este tipo de escenarios es negociar con el acreedor. Para ello, hoy en día existen profesionales en el tema que te pueden ayudar a solventar problemas de liquidez, como las reparadoras de crédito. 

Este tipo de empresas implementan un modelo con el cual te ayudan a liquidar las deudas sin la necesidad de pedir más préstamos. Incluso, negocian con los acreedores para conseguir descuentos sobre el monto de las deudas.