Después de que concluye un ejercicio fiscal, tanto personas físicas como morales deben presentar su declaración anual de impuestos ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Sin embargo, en el caso de las personas morales del Régimen General de Ley, es importante considerar el ajuste anual por inflación sobre los créditos y deudas; mismo que puede representar una deducción autorizada si los créditos son mayores a las deudas, o un ingreso acumulable si es que las deudas son mayores a los créditos.
¿Qué es el ajuste anual por inflación?
El ajuste anual por inflación permite a las personas morales, que son las empresas, medir el impacto del aumento de los precios a través del tiempo en sus créditos y deudas; es decir, cómo es que el alza en los precios va afectando el dinero que una empresa recibe de otra como resultado de actividades empresariales, así como las obligaciones de pago pendientes que tiene la empresa con otra.
Para presentar su declaración anual, las empresas deben calcular el ajuste anual por inflación para determinar el Impuesto sobre la Renta (ISR) que le corresponde. Y este cálculo puede ser deducible o acumulable:
- Ajuste anual deducible- Es el resultado de cuando los créditos son más altos que las deudas. Esto porque, gracias a la inflación, cuando la empresa recibe el dinero que le deben ya no tendrá el mismo valor, y, de esta manera, se convierte en una deducción autorizada.
- Ajuste anual acumulable- Es cuando las deudas de una empresa son mayores a los créditos. Así, debido a la inflación, el valor de la deuda se reduce y cuenta como un ingreso para declaración anual.
¿Cómo se calcula el ajuste anual por inflación?
De acuerdo con la Ley de Impuestos Sobre la Renta, el ajuste anual por inflación se calcula de la siguiente forma:
- Las empresas deben registrar las deudas y créditos que hayan adquirido mes con mes, pero omitiendo los pagos que hayan hecho al respecto. Esas cifras deberán sumarse para obtener el saldo promedio anual de deudas y créditos.
- Si el saldo de las deudas es mayor al de los créditos, será necesario multiplicar la diferencia por el factor de ajuste anual; de esta manera se obtendrá el ajuste anual por inflación acumulable.
- Por el contrario, si el saldo de los créditos es mayor que el de las deudas, se deberá multiplicar la diferencia por el factor de ajuste anual para determinar el ajuste anual por inflación deducible.
- Para obtener el factor de ajuste anual, se debe restar el resultado del cálculo de inflación acumulable o deducible menos el resultado de la división del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del último mes considerado para el ejercicio anual entre el INPC del último mes del ejercicio del año anterior.
Cabe mencionar que todos estos cálculos se deben realizar en pesos mexicanos, y, en caso de que alguna cantidad esté en moneda extranjera, deberá hacerse la conversión correspondiente.
¿Qué son los créditos para efectos del ajuste anual por inflación?
Según la Ley del ISR, un crédito es el derecho de una persona moral, o empresa, de recibir de una cantidad de dinero por parte de un deudor.
Se consideran créditos:
- Aquellos adquiridos por empresas de factoraje financiero
- Saldos a favor
- Inversiones en acciones
No son créditos:
- Aquellos que no provengan de actividades empresariales
- Efectivo
- Socios o accionistas residentes en el extranjero
- Funcionarios y empleados
- Pagos provisionales de impuestos
- Estímulos fiscales
- Acciones y títulos de crédito
¿Qué son las deudas para efectos del ajuste anual por inflación?
La Ley del ISR define con deuda como una obligación financiera pendiente de cumplimiento.
Se consideran deudas:
- Contratos de arrendamiento
- Operaciones financieras
- Aportaciones para futuros aumentos de capital
- Contribuciones
- Pasivos y reservas del activo, pasivo o capital
No son deudas:
- Deudas residentes en el extranjero
- Gastos no deducibles
¿Todas las personas morales deben considerar el ajuste anual por inflación?
Es importante aclarar que no todas las empresas están obligadas a determinar el ajuste anual por inflación, pues la ley excluye de esta responsabilidad a las personas morales de Título III; es decir, no lucrativas.
Además, también existe un Régimen de Confianza para las empresas con ingresos de hasta 35 millones de pesos al año, las cuales tampoco están obligadas a determinar este ajuste.
