Un crédito es una operación financiera mediante la cual una entidad o persona, denominada como acreedor, otorga cierta cantidad de dinero a otra, que se conoce como deudor, que tendrá que devolver el dinero bajo los términos y condiciones que se establezcan.
Hoy en día, la oferta de créditos ha crecido de manera importante, pues las entidades financieras buscan cubrir las necesidades de cada persona. Uno de los más solicitados son los créditos revolventes.
¿Qué son los créditos revolventes?
Un crédito revolvente es aquel que otorga a los acreditados una línea de crédito permanente determinada por la entidad financiera acreedora; lo cual significa que el cliente puede disponer de su crédito tantas veces como lo requiera, siempre y cuando realice los pagos parciales o totales del crédito utilizado, a fin de que éste se renueve.
Un buen ejemplo del crédito revolvente son las tarjetas de crédito bancarias, departamentales y de autoservicio, mismas que cuentan con un límite de crédito que disminuye conforme se hacen compras, pero, cuando el tarjetahabiente realiza sus pagos, la línea de crédito se reintegra para volverse a utilizar.
¿Cómo funcionan los créditos revolventes?
El funcionamiento de los créditos revolventes es bastante sencillo. Cuando solicitas un crédito de este tipo, la entidad financiera establece un límite de crédito fijo que podrás usar como desees, ya sea total o parcialmente; así como una fecha de corte y una fecha en la que mes con mes deberás pagar lo que gastaste.
Cabe mencionar que, si demuestras ser un buen cliente y pagas tu crédito en tiempo y forma, tras cierto tiempo, la entidad financiera podrá ofrecerte aumentar tu límite de crédito; aunque debes tener en cuenta que los créditos revolventes tienen tasas de interés más altas que los préstamos tradicionales.
Por ejemplo, si el banco o entidad financiera te otorga una línea de crédito revolvente de 20,000 pesos, con fecha de corte el 15 y fecha de pago el 5 de cada mes; y tú decides utilizar 5,000 pesos para adquirir algún producto o servicio a meses sin intereses.
Dichos 5,000 pesos se quedarán congelados por estar a meses sin intereses, y deberás pagarlos en tiempo y forma. Mientras que los otros 15,000 restantes de tu crédito revolvente estarán libres y podrás utilizarlos aun sin que hayas pagado los 5,000. Y, una vez que liquides lo que gastaste, volverás a tener 20,000 pesos disponibles.
¿Son iguales a los créditos tradicionales?
No. Si bien son similares, hay algunas diferencias importantes entre un crédito revolvente y un crédito tradicional. Por ejemplo:
- Renovación. Los créditos tradicionales son de un solo uso; es decir que no se renuevan conforme vayas pagando, tienes que liquidarlo en su totalidad para tener la posibilidad de obtener otro.
- Tasas de interés. Los créditos tradicionales incluyen una tasa de interés fija para toda la vida del crédito; mientras que los revolventes no incluyen intereses si se pagan en tiempo y forma, pero si te atrasas con los pagos, la tasa de interés es más alta que la de los créditos tradicionales.
- Uso. Por lo anterior, los créditos revolventes se recomiendan para gastos cotidianos, como ropa, comida, pago de servicios, etcétera; y los tradicionales generalmente se utilizan para gastos más fuertes, como la compra de una casa, un auto o emprender un negocio.
- Forma de pago. En el caso de los créditos tradicionales, los pagos mensuales serán fijos durante toda la vida del préstamo; es decir, cada mes pagarás lo mismo hasta que liquides la deuda. Por su parte, el pago de los créditos revolventes dependerá de lo que gastes.
¿Qué tipo de créditos revolventes existen?
Estos son los tipos de crédito revolvente más comunes que puedes solicitar:
- Tarjetas de crédito: Este es el crédito revolvente más común, en el que los bancos otorgan un límite de crédito del que los tarjetahabientes pueden disponer cuantas veces requieran.
- Tarjetas departamentales y de autoservicio: Funcionan de forma similar a las tarjetas de crédito bancarias, solo que estas son otorgadas por tiendas departamentales y de autoservicio para que sus clientes puedan adquirir sus productos de una manera más sencilla.
- Crédito personal: Es un préstamo que se otorga mediante cheques o depósitos directos en la cuenta bancaria del acreditado.
- Crédito con garantía hipotecaria: Se trata de una cuenta de crédito que permite obtener recursos contra el valor de la propiedad del cliente.
¿Cuáles son las ventajas de los créditos revolventes?
Los créditos revolventes resultan bastante útiles y cuentan con muchas ventajas, entre las que destacan:
- Posibilidad de hacer compras a meses sin intereses
- Puedes disponer del dinero de forma inmediata cuando lo necesites
- También puedes aumentar tu línea de crédito si pagas en tiempo y forma
- Evitas arriesgar tu seguridad al no usar dinero en efectivo
- No incluyen intereses, siempre y cuando pagues en tiempo y forma
- Se obtienen fácilmente, aún si no cuentas con historial crediticio
Lo que hay que considerar
Como ya vimos, los créditos revolventes son una muy buena opción para aquellos que necesitan liquidez inmediata; sin embargo, es importante administrar el crédito correctamente. Aquí algunos consejos:
- Paga a tiempo todos los meses. Ten en cuenta que, si no lo haces, se te cobrarán intereses muy altos por el atraso; además de que esto podría afectar tu historial crediticio y, por consiguiente, tu capacidad para obtener otros financiamientos.
- Mantén mensualidades bajas. Si bien puedes usar la totalidad del crédito que se te otorgó, no significa que debas hacerlo, en especial si no tienes la capacidad de pago necesaria. Por eso, es importante que no gastes de más y mantengas tus mensualidades bajas, a fin de que no se te complique pagarlas.
- No solicites demasiados créditos revolventes. Si ya tienes una tarjeta de crédito o cualquier otro crédito revolvente, y estás pensando en solicitar otro, es fundamental que antes analices tu capacidad de pago para evitar un sobreendeudamiento.