Cuando caes en mora y dejas de cubrir tus mensualidades, se corre el peligro de que tu cuenta sea turnada a un despacho, comiencen las llamadas de cobranza para exigir el pago completo y, debido a que es un crédito automotriz, te pidan el automóvil de vuelta ya que es la garantía de pago. Si estás viviendo esto, necesitas actuar de forma estratégica y rápida.
Primero busca comunicarte con tu acreedor, intenta llegar a un acuerdo y explícale la situación que desembocó en pagos atrasados. Quizá te permitan una reestructuración en la que se extienda el plazo de cobro pero con mensualidades menores. Si no ocurre, evalúa tus condiciones económicas y ajusta tu presupuesto para limitar tu gasto lo más posible.
Otra opción es buscar ingresos extra, puede ser a través de la venta o renta de tus bienes, adquiriendo un trabajo de medio tiempo o capitalizando algún conocimiento o actividades que realices. Si logras bajar las compras e incrementar los ingresos, acumularás dinero que podrás aplicar a tu deuda para que baje y vuelvas a estar al corriente.
Por último, no olvides que hay empresas que actúan como intermediarios y mientras negocian con tu acreedor, te generan un plan de pagos más cercano a tus condiciones económicas actuales. Si deseas conocer más al respecto, solicita una asesoría y te ayudaremos a encontrar la mejor solución para tu caso.